Todos estamos hechos de la misma masa

Todos estamos hechos de la misma masa

jueves, 30 de junio de 2011

OTRA CORTINA DE HUMO

En este último e insulso debate del estado de la nación, cuando seguramente tocaba hablar de eso, del estado de la nación y las posibles soluciones o medidas correctoras a adoptar, sale nuestro "talantoso" presidente y se deja caer con lo de "proteger" a los que no pueden pagar su hipoteca.  No es la primera vez ni será la última que de forma inteligente pero descarada nuestros gobernantes lanzan cortinas de humo para distraer la atención de lo esencial. 
Recuerdo no hace más de dos años cuando, en situación de parecida evidencia, salieron con lo de reformar la ley del aborto, cosa que no era clamor social y que nadie estaba pidiendo como prioritario.  
Así nos va.  Curioso es que aparentemente sesudos periodistas e informadores caigan en la trampa y se centren en hablar del tema, del tema distractivo.  O son más ilusos de lo que debieran o están cosidos con coincidentes intereses.  Si no, no se explica. 
A veces pienso que nuestros dirigentes, o más bien sus asesores políticos y de imagen, tengan una lista de noticias o de iniciativas siempre preparada para echar mano de alguna que cree la cortina de humo pertinente que oculte sus errores y vergüenzas.

domingo, 26 de junio de 2011

¿Ser xenófobo en España?

Divago aquí en torno a una pregunta que me hago a mí mismo: ¿me he vuelto en alguna medida racista o xenófobo?.   Ya "me tocó" divagar una vez en este blog sobre asunto parecido.  En aquella ocasión mi intención era más divulgativa, digamos, centrándome en la conveniencia de contratar solamente a extranjeros documentados.  En esta,  abordo la cuestión de fondo de la percepción y los estímulos que todos, muchos o algunos, yo por ejemplo, recibimos de inmigrantes venidos a España.

De entrada, creo que no, que no "padezco" de racismo ni xenofobia.  Jamás he sentido aversión, rechazo, temor ni menosprecio por ningún otro ser humano en función de su origen, etnia, color de piel, sexo ni cultura.    Otra cosa distinta es que bastantes experiencias en estos ultimos años me lleven a valorar negativamente la fiabilidad, calidad humana y sociabilidad de muchos de los inmigrantes que nos han llegado. 
Como, no puede ser de otro modo, son en su mayoría, personas de escasa formación, información y a veces de escasa educación.  Sus comportamientos sociales los veo condicionados por su propio complejo de exclusión, de ser distintos y por esa difícil de describir actitud que presenta el ser humano cuando se ve inmerso en un entorno social nuevo, distinto, una sociedad que es vista por el foráneo como "superior" o de mayor nivel.   Con esta percepción, el inmigrante tiende a comportamientos y movimientos caracterizados en alguna medida por la arrogancia.      

Mi más reciente vivencia ha sido hace poco, cuando en un centro de salud decidí esperar mi turno al ver que el número que la máquina me dispensaba era sólo cinco posterior al que estaba siendo atendido.  Uno de los dos empleados se ausentó y la que quedó tardaba insoportablemente con el número 19 al igual que con el siguiente, el 20.   Por fin, transcurridos 25 minutos cambió el número llamado al 21, nadie se acercó, pasó al 22, luego al 23, igualmente.   Me acerqué al puesto de atención con mi número 24 y una voz espetó tener el 23.  Con gesto amable le invité a que se acercara al mostrador y me aparté un par de metros.  

Esa distancia fué ideal para no perder puntada de lo que planteaba esa persona, usuaria en este caso.  Mujer, de treintaypico años, morena, de baja estatura y algo gruesa, con claro acento sudamericano.  

Entregó con denuedo un carnet, vi que era un NIE, a la empleada y dijo querer una cita para la doctora de su hijita.  La empleada le respondió con voz tenue y amable que si tenía la tarjeta sanitaria a lo que la mujer respondió que no, que la debía tener su marido.   

La empleada le dijo que precisaba la tarjeta sanitaria ya que por el número de NIE, según amablemente le explicaba, no podía darle cita.  
Se sucedió un interminable intercambio de peticiones por parte de la empleada y de excusas por parte de la usuaria. Intentos de solución de la empleada, protestas inapresuradas por parte de la señora,  cambios de versión de ésta pasando a decir que su marido tampoco tenía la tarjeta, etc. etc.
Tras 15 minutos en tensa espera y viendo que no resolvían la cuestión  me acerqué respetuosamente y le pedí a la usuaria que me cediera un momento para que me sellaran un documento nada más.  Sencillamente ni volvió la cara para oirme.  Seguí esperando, ya con impaciencia y enfado, y menos mal que la propia empleada se decidió a emplazar definitivamente a la señora a que volviera con la tarjeta sanitaria o solicitara un duplicado informándola de dónde se la podían dar en el acto. 

Experiencias parecidas he tenido en supermercados, en parkings y en otros lugares públicos.  Con respecto a esto de la atención sanitaria termino esta divagación respondiendo con una pregunta a quienes postulan aquello de "ellos también cotizan..." :  ¿quiénes han "pagado" la Residencia Sanitaria "Virgen del Rocio" por ejemplo , las costosas máquinas de todo tipo de que dispone nuestra sanidad pública, los grandes hospitales que desde los años 60 empezamos a tener en este pais?, ¿los que llevamos desde entonces cotizando sin parar o los que de 5 años para acá han estado tanto tiempo cotizando (generalmente bajas cuotas) como cobrando el desempleo?. 
Hasta para entrar en un club social o deportivo has de pagar una alta cuota de ingreso que te equipare a los que están allí antes que tú. 


Sé que es un tema para la polémica pero por divagar que no quede. 

UNA DIVAGACION PSICOLÓGICA

El tener más de cincuenta da para haber acumulado multidud de experiencias y recuerdos y haber forjado opiniones basadas en hechos y observaciones empíricas y no en deducciones mediatizadas por las creencias y los posicionamientos ideológicos.  

Un interesante libro que leí y que recomiendo, como todos los de Eduardo Punset, se titula "El alma está en el cerebro".  Que el alma está en nuestro cerebro se ha ido haciendo cada vez más patente de un siglo para acá. 

Hasta para los sentimientos más nobles y las capacidades más sofisticadas del ser humano vamos descubriendo que hay un "trozo" físico del cerebro donde su control reside o varias áreas en interacción.  Es el caso, por ejemplo, de la empatía, de la timidez o de la vergüenza, de la ira o de la agresividad.  En esta línea intuyo que son ubicables fisiológicamente comportamientos, tendencias y propensiones del ser humano que atribuimos a imponderables como el carácter y la educación.  

Cuestión de tiempo, igual no poco pero llegará, el que hasta las respuestas y las conductas que consideramos más "sublimes" tengan una base fisiológica, neuroquímica. 

GLOBALIZACION -----> ¡¡ DE LA MISERIA !!

               La actual crisis que, fundamentalmente, es una crisis del consumo, da para pensar mucho.  Crisis del consumo porque el número de consumidores potenciales ha bajado a consecuencia del incremento de personas sin ingresos, los parados, y, como además, subyace una crisis de confianza, ésta provoca que los que pueden consumir no lo hacen por temor a lo que pueda estar por venir.  La desconfianza atenaza igualmente a los que prestan dinero: bancos, cajas y entidades de financión en general.   Nadie se fia de nadie ni de nada. Es como una parálisis progresiva del sistema económico. 
             Apoyándose en esta crisis, los poderes fácticos: empresas multinacionales, inversionistas, especuladores, empresarios en general, propugnan cambios en las reglas del juego que regulan las relaciones entre empleadores y empleados.  Más que cambios cabe decir disminuciones en las percepciones de todo tipo de los trabajadores y menoscabo de sus derechos. Costó decenios, incluso siglos, lograr el nivel de garantías y derechos que los trabajadores tienen (han tenido) en el primer mundo y va a ser cosa de dos o tres años el perderlo.  ¿Qué puede estar ocurriendo?. Sencillamente que la cara más oscura y siniestra de la globalización se está dejando ver.  No está ocurriendo, y es palpable ya que no va a ocurrir, que el tercer mundo converja hacia el primero, sino al revés. En los términos en que está implantado el capitalismo, la economía de mercado y las relaciones internacionales, lo que se nos echa encima es un retroceso de imprevisible alcance en las condiciones laborales y de vida de los trabajadores de los paises del primer mundo para aproximarse hasta no se sabe cuánto a los trabajadores del tercer mundo, paises en vias de desarrollo y economías emergentes.  Si un trabajador en China, o en Corea, o en Brasil o en Filipinas fabrica un bien por 2 euros, en un mundo globalizado las empresas y los propietarios de los medios de producción en general no están dispuestos a pagar 4 euros, por ejemplo, a un trabajador europeo.  Es lamentable, pero está ya ocurriendo que en vez de prosperar las sociedades emergentes para que en ellas la producción de ese bien llegue a pagarse igualmente por 4 euros, presionan los poderes para lo contrario, que en los paises avanzados se pague a 2 euros.  La globalización no es "mala" en sí misma sino en tanto en cuanto se sirvan de ella para generalizar la "miseria".   Esto creo que está ocurriendo SE ESTA GLOBALIZANDO LA MISERIA.    

UNA DIVAGACION MONUMENTAL

En una ciudad como la que habito, Sevilla, no puedo más que preguntarme cada vez que merodeo por sus zonas monumentales y por las que no lo son tanto, como es lo que queda de la Expo-92, cuán de rentable le resultaría a los ayuntamientos "Invertir" (que no gastar) en protección y vigilancia del acervo monumental que el pasado nos ha entregado.  
En ciudades grandes con patrimonio monumental de importancia, lo que en España es como decir casi todas, sorprende que las autoridades municipales no hayan puesto medios preventivos y coercitivos que impidan o cuando menos minimicen los efectos del vandalismo sobre dichos patrimonios.   ¿Es que no sería mucho más barato que emplear importantes cantidades de dinero en restaurar periódicamente los monumentos ?.   
Ahora, con la que está cayendo de crisis y desempleo, con más razón.   Apuesto que resultaría rentable para nuestra economía municipal pagar unos pocos de sueldos a vigilantes a turnos que en pequeños vehículos eléctricos, scooters o minicoches, hagan rondas de vigilancia permanente. 
Es viejo dicho el que reza "más vale prevenir que curar" (y en arte no siempre curar es posible).  Me da pena y vergüenza cuando veo los enormes arreglos que cada pocos años tienen que hacer en la Plaza de España, en el Parque de María Luisa y todos los espacios públicos de la ciudad.  
Y aún hay más, puesto que si nos fijamos además en la ciudad en su conjunto,  allende sus monumentos históricos, ¿qué decir de lo asqueroso que está todo cubierto de grafittis y pintadas?, ¡cuánto mobiliario urbano deteriorado y a veces detrozado!, y tantas otros deterioros evitables. 
¿Es que ningún responsable con capacidad de acción se da cuenta de esto? 
   



SOBRE LA IMPREVISION DE NUESTROS POLITICOS

Rescato esto que escribí allá por 2009 cuando empezaba a ser un hecho aceptado por todos que la economía de muchos paises, de forma muy importante la del nuestro, estaba en recesión y en crisis.

Nada por aquí, nada por allá.... voilá.  Juegos malabares de nuestros dirigentes, magia de pacotilla, para tratar de hacernos ver lo blanco negro y para marearnos con cifras, estadísticas y previsiones sin fundamento que nunca se cumplirán.

Pongamos por ejemplo uno solo de los conceptos de ingresos de las arcas públicas, el Impuesto de Transmisiones:    ¿Cúantos millones de euros por encima de lo presupuestado no ingresarían por este impuesto en los años previos de vacas gordas?, ¿qué han hecho con esos enormes ingresos, con esos excedentes de ingresos?. 

 Es claro que si al ritmo que han estado subiendo los precios de los inmuebles, incluso de un año para otro, sumamos el incremento enorme en el número de compraventas, el exceso de recaudación ha debido ser altísimo durante varios ejercicios.  Imagínese Vd.: el 7% de todo lo que en España se ha estado vendiendo y a los precios que se ha estado vendiendo. 

Ahora que las vacas adelgazan por falta de pasto, no hay graneros ni pajares de los que tirar.  ¡ Qué malos administradores !   


 
   

SOCIOGRAMA DEL HARLISMO

De mis experiencias durante 14 años ligado a la práctica del mototurismo y al asociacionismo en torno a la afición por las motos extraigo las conclusiones siguientes:
  1. El porcentaje de "piraos" en estos colectivos es superior al que se da en el conjunto de la sociedad
  2. De entre los asociacionismos por práctica de actividades, el de la moto es uno de los más propensos a crisis asociativas y a disensiones y rupturas.
  3. La actividad que alía y reune a los miembros del colectivo es la tenencia, exhibición y utilización de una máquina, la moto.   Tal actividad tiene una componente subyacente preeminente de binomios contradictorios como son admiración-envidia,  solidaridad-competitividad,  presunción-naturalidad, exhibicionismo-pasotismo y otros muchos.
  4.  La actividad compartida principal, que es el hacer rutas en moto, tiene además un factor de riesgo intrínseco que activa reacciones peculiares y provoca respuestas que el indivíduo reprime o modera con más dificultad que en otros contextos.
  5. La literatura y el cine han forjado e inculcado estereotipos y misticismo que a muchos practicantes del motorismo les hace creerse poco menos que héroes, hombres rudos, llaneros solitarios, forajidos inapresables y tantos otros clichés que modelan el comportamiento "espontáneo" del sujeto convirtiendo a personas de interacción social aceptable en rebeldes sin causa o lo que es peor, instigadores conflictivos. 



Los factores antedichos conforman un inestable edificio de relaciones humanas en las que la propensión a fisuras, derrumbes parciales y totales es manifiesta.  No hay más que ver la frecuencia y la facilidad con que clubes, peñas y asociaciones moteras sucumben.   
  

MODERNA DEFINICION DE LA PALABRA "PRISA"

La rutina diaria del tráfico urbano me lleva a entrever la que podría ser una acertada y nueva definición de la palabra PRISA. Bien estará que se incluyera en un diccionario que ojalá existiera y que, como alternativa al erudito de la Real Academia o al Espasa, diera a los jóvenes definiciones más prácticas y palpables de las cosas.

Prisa, hoy es, sin duda para mí, lo que denotan los conductores de scooter potentes y de furgonetas en general. Parece mentira que vehículos, las scooters, de ruedas pequeñas y tan inestable equilibrio, se deslicen por esas calles y avenidas a las velocidades que lo hacen y con trayectorias tan zizagueantes y peligrosas. Adelantan sin aviso por la derecha incluso a las otras motos, hacen contramanos disimulando con un pie en el suelo, se suben por las aceras para colocarse los primeros en el semáforo. Es como si tuvieran licencia para "matar" (o matarse) esos conductores apoltronados tras la coraza cual si vieran la TV sentados a la mesa camilla del salón de su casa. Por su parte, las furgonetas, cuanto más grandes peor, te adelantan centelleantes por carreteras y autovias con sus adhesivos TDI en los portones traseros cual si fueran prototipos de Formula 1. Te quedas anonadado cuando con tu turismo potente y el limitador de velocidad puesto en 120 te sobrecogen al sobrepasarte fugazmente esas moles rotuladas.

No sé en qué porcentaje de accidentes se verán implicados vehículos de este tipo. A su alcance lo tiene el Ministerio del Interior, ya que deben saber o pueden calcular qué porcentaje del total de vehículos matriculados y en activo representan y, a la vez, en qué porcentaje del total de accidentes participan. Si los resultados son los que espera cualquier ciudadano que, como yo, circula cada dia por las calles y carreteras, se hará patente que para conducir estos vehículos deberían las autoridades establecer especiales pruebas de idoneidad y/o de sometimiento a las normas.

Incluso podría resultar de todo ello un nuevo grado en el permiso de conducción de automóviles, igual que los hay tan específicos como el que para enganchar a tu coche un remolque resultando que, ambos a plena carga, superen los 3.500 kg., ya se precisa.